¡Ya tenemos casi nuestro árbol!
Hoy, debemos continuar donde lo dejamos ayer. Volvemos a echar cola y agua en las partes más blandas para endurecerlo y lo dejamos secar. Más tarde, comenzamos a hacer agujeros a lo largo de todo el tronco para, así, poder colocar las ramas. Además, hemos conseguido ramas naturales, por lo que creemos que dará más realidad a nuestro árbol. Tras realizar los agujeros, lo colocamos en una base para darle consistencia, una caja de cartón, y comenzamos a colocar las ramas, añadiendo cola y agua donde los agujeros sean demasiado grandes y queden huecos, y grapando las ramas al tronco o añadiendo más cola. Os dejo unas fotos del proceso, realizadas por mí o alguno de mis compañeros de grupo: Fotos realizadas por Alejandro Blanco El resultado de nuestro trabajo es el siguiente: Fotos realizadas por Alejandro Blanco Creemos que esta actividad sirve para, en primer lugar, darnos cuenta de la cantidad de materiales que se puedan utilizar para manualidades que ...